A solo semanas de que París se prepare para los Juegos Olímpicos, el gobierno francés ha sido objeto de críticas severas debido a un programa que involucra la expulsión de migrantes de la capital en camiones, sin proporcionarles vivienda adecuada en otras ciudades de Francia.
Según un reportaje del New York Times, los migrantes son subidos a camiones y enviados a otras ciudades como Orleans sin garantías reales de alojamiento o apoyo. Esta acción, oficialmente promocionada como un esfuerzo para reubicar a las casi 100 mil personas sin hogar en los alrededores de París, ha sido condenada por organizaciones y funcionarios locales como una forma de «limpieza social».
«Nos expulsaron por los Juegos Olímpicos», lamentó un migrante de Chad entrevistado por el New York Times. Otro migrante, originario de la República Centroafricana, describió cómo recibió un boleto al azar que lo llevó a Orleans, sin opciones reales.
Aunque el programa del gobierno francés ofrece la posibilidad de mudarse a otras ciudades con la promesa de refugio temporal o la finalización de solicitudes de asilo, los migrantes se encuentran frecuentemente en situaciones precarias. Según el reportaje del Times, la mayoría vive en refugios improvisados y enfrenta dificultades para acceder a los beneficios prometidos.
Además, ha surgido un conflicto entre ciudades francesas debido a este programa. Funcionarios de Marsella criticaron a París por no informarles sobre la llegada de migrantes, cuestionando las prioridades presupuestarias del gobierno central.
Este enfoque hacia los migrantes ha llevado a la designación irónica de los Juegos Olímpicos de París 2024 como «Los Juegos de la Exclusión». Las críticas internacionales han resaltado la falta de humanidad y la contradicción entre los valores olímpicos de inclusión y la realidad de la política migratoria francesa.
A medida que la comunidad internacional observa con expectación los preparativos para los Juegos Olímpicos, la situación de los migrantes desplazados destaca como un tema urgente que necesita atención y soluciones más humanitarias por parte del gobierno francés.