Ante la sequía que azota la entidad, en el periodo otoño-invierno, el ciclo de riego tuvo una reducción del 30 por ciento de la disponibilidad de agua para los cultivos en Michoacán, compartió el titular de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural del estado (Sader), Cuauhtémoc Ramírez Romero.
En entrevista con medios de comunicación, el titular de la Sader del estado platicó que por ejemplo en la producción de trigo el riego en algunas zonas se tuvo que compensar con bomberos y con pozos profundos, pero también hubo otras zonas que prefirieron no sembrar.
Explicó que con el agua que se decidió no utilizar en estas zonas donde no sembraron y almacenada en las presas, que en promedio es del 65 por ciento, se usará en el riego del ciclo primavera-verano.
Dijo que hay cultivos que se comienzan a sembrar en mayo y también esperan que el temporal de lluvias mejore.
Aunque, apuntó que para el ciclo de riego de primavera-verano, que comienza en abril, se espera una condición de siembra similar a la del año pasado.